Mi pooooolloooooooo!!!

Hace ya algunos años, hicimos una fiesta en la casa donde vivía en Monterrey con Nancy, Edurne, Marita y Ana Sofía. Según nuestros cálculos, llegaron más de 100 personas (sin contar a los colados)... Fue un señor fiestón donde hubo de T-O-D-O (pero esa es otra historia!).

El caso es que ya entrada la noche, de repente alguien me dice que se metió un albañil borrachito a la casa. Pero lo raro no era que estuviera dentro, sino que estaba grite y grite algo así como: "mi pooooollooooooooo!!!"

- Amaya :"¿Y cómo se metió?"

- Cuates: "No, pues quién sabe, como que se confundió de casa porque anda todo borracho..."

- Amaya: "Hay que sacarlo de aquí"

- Cuates: "Oye Amaya, pero es que está gritando algo de su pollo..."

- Amaya: "QUE POLLO NI QUE NADA; SÁQUENLO YA!!"

Peeeero cuando escuché que el señor seguía gritando "Mi poooooolloooo" con tanta angustia, me dio curiosidad y fui a ver qué onda....

En eso, veo al señor, todo andrajoso, tratando de zafarse de mis cuates, retorciéndose y estirando su brazo señalando algo a lo lejos...

Ese "algo" era nada más y nada menos que Juanemilio, bien jarra y tragándose con desesperación y hambre el espagueti y el pollo de un platito de fiesta forrado en papel aluminio (que por supuesto le había robado al pobre señor)....

¿Por qué no puedo tener amigos normales?

- Amaya