jueves, marzo 25, 2010

La (triste y paulatina) extinción de los espacios públicos

El rector lo acaba de anunciar: El Tec Campus Monterrey cerrará por las noches. Simplemente no puedo concebirlo, ¿a esto teníamos que llegar?

Muchos creerán que exagero, que muchas escuelas y universidades cierran sus puertas por las noches, que es normal. Pero esto va más allá de los horarios. Esto representa un retroceso. Es un sacrificio que no deberíamos realizar. Es la simple y llana libertad coartada.

El atrincheramiento de las personas en espacios cerrados y privados es cada vez más evidente. Estamos presenciando una paulatina extinción de los espacios públicos. Cada vez hay menos niños jugando en las calles, en los parques y jardines. Cada vez es más peligroso recorrer las plazas y los centros de nuestras ciudades. Ahí está de testigo Morelia y un 15 de septiembre trágico.

Vamos, ni siquiera podemos estacionar libremente nuestros vehículos porque los franeleros se apropian de esos espacios que son, sin duda alguna, de todos. Cubetas con cemento y botellas de Coca-Cola con agua son los instrumentos de un poder deforme. Y nuestra libertad de estacionarnos se va por el caño si no pagamos la cuota respectiva para ocupar el codiciado lugar.

La crisis económica también nos recluye. ¿Cómo hacer para ir a cualquier lado si no hay dinero? ¿Una ida al cine? Imposible para un mexicano que gana menos de 5 salarios mínimos. Y menos si se trata de una familia con más 5 integrantes...

A la falta de dinero se le suma la creciente inseguridad. ¿Ir a tomar un par de cervezas a un bar? Mejor hay que pensarlo dos veces, las balaceras ya son pan de todos los días...

Y ahora, lo último que nos faltaba. El terrorismo perpetuado por el narcotráfico y el crimen organizado. Sí, porque aunque se nieguen a utilizar este término, de eso se trata, de acciones terroristas sin causa que afectan cada vez a más personas ajenas a la delincuencia.

Algo estamos haciendo mal. Como me dijo Ixchel, la sociedad debería ir recuperando espacios públicos, no perderlos. Estamos caminando en la dirección contraria.

Lo peor de todo es que allá arriba no cesan en sus intentos de convencernos que se trata solamente de una "minoría ridícula".

- Amaya

1 comentario:

Raptor Plateado dijo...

creo que estas medidas de seguridad no deberian existir, claro esta que es muy complicado cambiar el otro problema que tenemos en México que esla violencia y a falta de un metodo para erradicarla se tiene que tomar medidas diferentes... ¿quepaso con los malechores educados, que solo se metian con los de su mismo tipo?¿ que paso con el codigo "ni mujeres ni niños"? creo que esto se complica día a día y que esta por empeorar...