Bueno, pues ahora sí que me quité un enoooorme peso de encima. Fue un miércoles 6 de diciembre que presenté mi defensa de tesis y que me anunciaron que a partir de ese momento contaba con el grado de Maestra... "Maistra", pa' los cuates...
Me faltan todavía algunas correcciones para poder entregar un trabajo empastado y chulo de bonito, pero ya no hay nada que impida que me den ese título, sí aquel que debí haber conseguido en mayo de este año y que por cuestiones de saturación psicológica tuve que postergar hasta diciembre...
En fin... Ahora, a lo que sigue. La búsqueda de chamba que se adivina frustrante será la prioridad en esta transición del 2006 al 2007. Espero que la maquinaria laboral se descongele pronto, después del impasse que sufrió con el fin de sexenio.
- Amaya
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