domingo, marzo 22, 2009

La Guayaba

El viernes fue cumple de Miriam, mejor conocida como la Guayaba. Aunque, pensándolo bien, como que eso no está muy claro, porque ella también me dice Guayaba a mí... Estoy confundida...
Pero bueno, a lo que voy...
La Guayabis es una de mis mejores amigas. Y eso lo sé, porque mis mejores amigas tienen un factor común: todas, absolutamente todas, viven torturándose con los pensamientos locos que habitan en sus mentes, y en vez de hacerse la vida más fácil, se la complican a la máxima potencia (me incluyo).
A Miriam la conocí en Toulouse y tengo que confesar que la primera impresión no fue nada buena. Para empezar, pensé que era una regia fresa que iba a Toulouse de compritas y que además hablaba demasiado golpeado y ronco como para tener un buen corazón (malditos prejuicios!!)...
Pero no, resulta que la Guayabita es todo lo contrario. Es una increíble confidente, una persona híper inteligente, una emprendedora que inspira, un corazón de pollo disimulado con voz ronca (jojo!) y, sobre todo, una amiga incondicional.
Con la Guayabita he vivido un chorro de experiencias. Por ejemplo, los primeros días en Toulouse cuando llegó un tipo todo drogo frente a su cuarto y yo me dediqué a espantarlo con mis múltiples amenazas y recursos discursivos altamente convincentes: "ay porfavorcito, señor drogadicto, váyase de aquí por lo que más quieraaaaa, buaaaa, mire, ¿qué no ve como nos salen las lágrimas de angustia? Le doy 20 francos pa' su churrito de mota, sí? sí?".
Gracias a Miriam, tuve la oportunidad de conocer el mundo de las joyas, lástima que por más que intentó hacer de mí una artesana joyera, mis manos torpes lo impidieron (chequen aquí las cosas padres que ella hace). Pero independientemente de eso, yo tengo que agradecerle a Miriam muchas cosas, entre ellas, haber conocido a otra gran amiga: Goretti.
Además, la Guayabita y yo también fuimos testigos de las hazañas juanemilianas, compartimos momentos etílicos en diferentes ciudades del mundo, esquiamos juntas (o al menos lo intentamos) en los Pirineos, preparamos platillos exóticos con tortillas enmohecidas, vivimos el episodio del besante en las peores fachas y sobrevivimos, tuvimos una de las argumentaciones más encendidas (e inteligentes) de la historia sobre el Judaísmo y el Cristianismo, lloramos juntas mientras le mentamos la madre a los hombres traicioneros y, claro, cómo olvidar el hecho que me abriera las puertas de su casa en Tuxtla durante 6 meses.
Guayabita: FELIZ CUMPLEAÑOS!
- Amaya

6 comentarios:

mj dijo...

Ay guyabis, gracias! cuántos recuerdos! estoy aquí con la lagrimita y el corazón de pollo disfrazado recordando nuestras peripecias! He decidido que voy a empezar a escribir las cosas divertidas cuando sucedan, aunque sea como minuta, porque todo se me olvida! no me acordaba del drogo acosador!!! que susto. Pero el besante, como olvidar al besante, ahhh!
Te quiero mucho mi guayaba!

Anónimo dijo...

pues feliz cumpleaños para Miriam con nuestro agradecimiento por el cariño que le dispensas a amaya.
muchos saludos a tu mami.
lin.

Anónimo dijo...

oye, que bárbara, quisiera ser una de tus mejores amigas, solo por que hicieras esos comentarios que en verdad dejan ver que la amistad que hay entre ustedes es de lo mejor que se pueda encontrar una.
las felicito. y a miriam doblemente por su cumpleaños.

Amaya Marichal dijo...

Guayabis, si ese día del drogo casi se te caen los calzones del susto!!! jaja!! Pusiste cara de "en qué cloaca vine a parar"

Un abrazote guayabis!!

:)

Anónimo dijo...

iba a escribir q q conmovedor regalo y q de seguro, la hicist chillar, entro a los comentarios, y lo compruebo con lo de la lágrima remi... felicidades Miriam y felicidades x ser verdaderas amigas

Amaya Marichal dijo...

Es que somos retechillonas, caray!

:)