"Soy Amaya y fui novia de un succionador de energía..."
Durante mucho tiempo estuve tratando de recorrer las intrincadas calles de mi cerebro para analizar la relación que tuve con June. La verdad es que nunca había conocido a alguien como él: Un tipo con ganas de llamar la atención, de papá canadiense y mamá libanesa, obsesivo-compulsivo, generoso, honesto, imprudente, hiperactivo, paranoico, extremista, emprendedor, con fuertes convicciones, prejuicioso, analítico, dramático, elocuente, con un gran corazón...
Empecé a salir con él porque sentía que me entendía como nadie. El tipo podía leer mi alma perfectamente. Sin embargo, no había día en el que June no se enganchara en una fuerte discusión con otra persona, hiciera una broma pesada, dijera un comentario imprudente o que actuara como el personaje de Jack Nicholson en "As good as it gets" ("Mejor imposible").
Al final de un día con June yo terminaba exhausta y, aunque parezca increíble, me tardé en descubrir la razón. En ese momento yo creía que bastaba con ser paciente...
Hace poco, me llamó la atención una frase que leí en el libro El talento nunca es suficiente: "Seamos realistas, algunas relaciones se sienten como si te estuvieran extrayendo la vida.."
TOING!!
Seguí leyendo y lo que encontré me puso a reflexionar sobre la gente que conozco. Según el autor hay algunos tipos de personas que probablemente nos herirán o nos quitarán energía y algunos de ellos son:
Los críticos que constantemente se quejan o dan un consejo no deseado.
Los mártires que son siempre las víctimas.
Los aguafiestas que son pesimistas y negativos.
Los aplanadores que no tienen sensibilidad hacia los demás.
Los chismosos que esparcen rumores y secretos.
Los controladores que no pueden soltar y dejar que las cosas sucedan.
Los hipócritas que apuñalan por la espalda.
Los envidiosos que odian el éxito de los demás.
Los volcanes que se llenan de ira y pueden explotar en cualquier momento.
Las esponjas que siempre están necesitadas pero nunca dan nada a cambio.
Los competidores que siempre llevan la cuenta de las represalias.
Por último:
"Si alguna relación requiere que utilices algo de tu energía por un tiempo, eso es normal. Pero si esa relación te consume energía todo el tiempo, entonces dicha relación tiene un efecto negativo en ti..."
Creo que todos nosotros podemos llegar a ser succionadores de energía. Yo misma creo que me he comportado como aguafiestas, mártir, o crítica en determinados momentos, pero estoy convencida que a estas alturas del camino, no me puedo dar el lujo de tener en mi vida personas que se comporten así todo el tiempo. Y ahora lo veo como una cuestión de salud.
A mí me gusta estar rodeada de personas creativas, exitosas, ocurrentes, estimulantes, generosas, inteligentes, honestas, curiosas, graciosas...
- Amaya
El famosísimo River Walk que está de pelos para irse a tomar un vinito o un cafecín y echar la chorcha sabrosamente...
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