"¿Quieres ser mi novia?" (segunda parte)

El destino quiso que Gurrumino y yo nos encontráramos de nuevo, así que nuestros caminos se cruzaron por segunda ocasión, pero esta vez se trataría de primero de secundaria en la Alemán, él iba en el "D" y yo en el "B". Habíamos crecido... (lo que sea que eso signifique)

Según los informes de mis amigas, Gurrumino empezó a mostrar cierto interés en mí. Así que un buen día, casi de la nada, mientras yo esperaba la combi a la hora de la salida, el susodicho se acercó, empezó a platicar conmigo, recordamos algunos momentos célebres de la primaria (obviamente omitimos algunos detalles vergonzosos) y luego, sin más preámbulos, me preguntó lo que yo ya presentía que preguntaría:

- ¿Quieres ser mi novia?, dijo un poco nervioso.

Le dije que sí... (otra vez¡!)

Pasaron algunos días (o semanas) en las que nos veíamos de vez en cuando, platicábamos de las clases, los profes, los cuates, el aliento del subdirector... Hasta que un día, sucedió lo inevitable:

Gurrumino puso cara de circunstancias, se paró muy derechito y me dijo susurrando, casi como no queriendo:

- Creo que es mejor dejarlo ahí y ser amigos...

Pffff! Este niño con sus puntos de vista tan razonables!! ¿Cómo podía no estar de acuerdo con él? Era taaaaan sensato todo aquello.

Sencillamente lo nuestro no podía ser...

- Amaya